Cómo elegir el mejor aplique solar para iluminar cada zona de tu jardín
Con la llegada del verano, los jardines y las terrazas se convierten en la estancia favorita del hogar para combatir el calor y pasar un rato agradable con los amigos, familiares o vecinos, sobre todo por las noches.
Para crear el mejor ambiente posible, lo primero que tienes que saber es el tipo de luminaria que vas a necesitar, y después buscar modelos y diseños que se adapten a tus gustos dentro de las posibilidades.
Dependiendo de la zona que quieras iluminar de tu jardín deberás utilizar lámparas, apliques, focos o balizas solares con un índice de protección contra cuerpos sólidos y líquidos (IP) adecuado para evitar que haya averías.
En Arteconfort puedes encontrar una amplia gama de luminarias LED solares que se adaptan a cualquier estilo y necesidad, desde guirnaldas solares hasta apliques solares con un alto flujo luminoso.
Tipos de Índice de Protección
El Índice de Protección es uno de los factores más determinantes a la hora de decantarse por un producto solar u otro, ya que su vida útil dependerá en mayor medida del material con el que esté fabricado.
De esta manera, cuanto más alto sea el número, mayor protección tendrá ante las condiciones ambientales adversas. Esta cifra generalmente está compuesta por dos números: el primero guarda relación con el nivel de seguridad contra los cuerpos sólidos y el segundo frente al agua.
Por ejemplo, si queremos iluminar una zona semi-cubierta como el porche o la terraza, con una lámpara solar que tenga un IP23 bastaría, mientras que si quieres aportar luz a la piscina de tu jardín deberás elegir un aplique solar que tenga la máxima protección frente a chorros de alta presión y temperatura (IP69).
Zonas de iluminación según el IP
Dependiendo del lugar donde vayas a colocar la luminaria, esta deberá tener un índice de protección mayor o menor. Las zonas que vayan a estar más expuestas a recibir salpicaduras o cualquier tipo de contacto directo del agua deberán tener un número superior al resto.
Zona A): Iluminación de accesos, caminos, senderos o escaleras. Para esta zona se recomienda luminarias que tengan un IP44, dependiendo de la distancia a la que estén de la piscina.
Zona B): Iluminación de fachadas o pasos. Igual que en la primera zona usaremos IP44.
Zona C): Iluminación en las proximidades a la piscina. En este caso aumentaremos la seguridad hasta un IP 55 para que estén protegidas frente a salpicaduras y chorros de agua a presión.
Zona D): Iluminación en el área de la piscina. Esta zona recibirá inmersiones de agua de manera regular por lo que tendremos que instalar luminarias de IP67.
Zona E): Iluminación dentro de la piscina. Los apliques solares estarán inmersos en el agua de manera permanente, por lo que tendrá que tener la máxima protección contra el polvo y el agua con un IP68.
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